Las alergias y las intolerancias alimentarias son dos tipos de reacciones adversas que pueden ocurrir cuando ingerimos ciertos alimentos. Aunque a veces se confunden, se trata de fenómenos diferentes que implican distintos mecanismos en nuestro organismo.
¿Qué son las alergias alimentarias?
Las alergias alimentarias son respuestas anormales del sistema inmunitario ante algunos componentes de los alimentos, llamados alérgenos. Estos alérgenos suelen ser proteínas que el cuerpo reconoce como extrañas y desencadenan una reacción inflamatoria para eliminarlas. Esta reacción puede afectar a diferentes órganos y tejidos, como la piel, el aparato digestivo o el respiratorio.
Los síntomas de una alergia alimentaria pueden variar desde leves hasta graves, e incluso poner en riesgo la vida. Algunos de los síntomas más comunes son:
- Hormigueo o picor en la boca
- Urticaria, comezón o eccema
- Hinchazón de los labios, la cara, la lengua y la garganta o de otras partes del cuerpo
- Sibilancias, congestión nasal o dificultad para respirar
- Dolor abdominal, diarrea, náuseas o vómitos
- Mareos, aturdimiento o desmayos1
En algunos casos, una alergia alimentaria puede causar una reacción alérgica grave llamada anafilaxia. Esto puede ocasionar signos y síntomas que pueden poner en riesgo la vida, entre ellos:
- Constricción y opresión de las vías respiratorias
- Inflamación o sensación de un nudo en la garganta que dificulta la respiración
- Choque debido a un descenso abrupto de la presión arterial
- Pulso acelerado
- Mareos, aturdimiento o pérdida del conocimiento1
En casos de anafilaxia, el tratamiento urgente es fundamental. Si no se trata, la anafilaxia puede causar un coma o incluso la muerte.
¿Qué son las intolerancias alimentarias?
Las intolerancias alimentarias son trastornos digestivos que ocurren cuando el organismo no puede digerir o metabolizar adecuadamente algún componente de los alimentos. Estos componentes pueden ser azúcares, grasas, proteínas o aditivos. A diferencia de las alergias, las intolerancias no involucran al sistema inmunitario ni producen reacciones generalizadas.
Los síntomas de una intolerancia alimentaria suelen ser más tardíos y menos específicos que los de una alergia. Algunos de los síntomas más frecuentes son:
- Dolor abdominal, cólicos o hinchazón
- Diarrea, estreñimiento o gases
- Náuseas o vómitos
- Dolor de cabeza o migraña
- Fatiga o irritabilidad2
Según el tipo de intolerancia alimentaria que se tenga, tal vez se pueda comer pequeñas cantidades de los alimentos problemáticos sin tener una reacción. Sin embargo, lo más recomendable es evitarlos o sustituirlos por otros más adecuados.
¿Qué causa las alergias y las intolerancias alimentarias?
Las causas de las alergias y las intolerancias alimentarias no están del todo claras. Se cree que intervienen factores genéticos, ambientales e individuales. Algunas personas tienen mayor predisposición a desarrollar estas afecciones que otras.
Los alimentos que suelen provocar alergias son aquellos que contienen proteínas con alto potencial alergénico. Los más frecuentes son:
- La leche y sus derivados
- Los huevos
- Los frutos secos
- Las legumbres
- Los cacahuetes
- El pescado
- Los crustáceos
- Los moluscos
- La mostaza
- El apio
- El sésamo
- Los altramuces
- La soja
- El dióxido de azufre y los sulfitos
Los alimentos que suelen provocar intolerancias son aquellos que contienen sustancias que el organismo no puede digerir o metabolizar correctamente. Algunos ejemplos son:
- La lactosa, el azúcar de la leche, que requiere de una enzima llamada lactasa para su digestión. Algunas personas tienen déficit de esta enzima y presentan intolerancia a la lactosa.
- El gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada, el centeno y la avena, que puede causar daño en el intestino delgado de las personas con enfermedad celíaca o sensibilidad al gluten no celíaca.
- Los aditivos alimentarios, como los colorantes, los conservantes, los edulcorantes o los potenciadores del sabor, que pueden provocar reacciones adversas en algunas personas sensibles.
- Las aminas biógenas, como la histamina, la tiramina o la serotonina, que se encuentran en algunos alimentos fermentados, madurados o en mal estado, y que pueden causar síntomas similares a los de una alergia.
¿Cómo prevenir o tratar las alergias y las intolerancias alimentarias?
La mejor forma de prevenir las alergias y las intolerancias alimentarias es evitar el consumo de los alimentos que las causan. Para ello, es importante leer las etiquetas de los productos alimenticios y verificar sus ingredientes. También es conveniente informar a los restaurantes o establecimientos de comida sobre nuestras restricciones alimentarias.
En caso de tener una reacción alérgica o intolerante a algún alimento, es fundamental consultar con un médico o un nutricionista para obtener un diagnóstico adecuado y un tratamiento personalizado. Algunas medidas que se pueden tomar son:
- Tomar antihistamínicos o corticoides para aliviar los síntomas leves o moderados de una alergia.
- Llevar siempre un autoinyector de epinefrina (adrenalina) y saber cómo usarlo en caso de sufrir una anafilaxia.
- Tomar suplementos de enzimas digestivas o probióticos para mejorar la digestión y el equilibrio de la flora intestinal.
- Seguir una dieta equilibrada y variada que incluya alimentos alternativos y seguros para cada caso.
Conclusión:
Las alergias y las intolerancias alimentarias son dos tipos de reacciones adversas que pueden afectar nuestra salud y calidad de vida. Es importante conocer sus diferencias, síntomas, causas y tratamientos para poder prevenirlas y manejarlas adecuadamente. Si crees que puedes tener alguna de estas afecciones, no dudes en consultar con un profesional de la salud.