La dieta mediterránea es un patrón alimentario basado en el consumo de alimentos naturales y frescos, como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, frutos secos, pescado, aceite de oliva y vino con moderación. También incluye el uso de hierbas aromáticas y especias para condimentar los platos y evitar el exceso de sal. Se trata de una dieta equilibrada, variada y con un bajo aporte calórico12.
Los beneficios de la dieta mediterránea para la salud son numerosos y están respaldados por numerosos estudios científicos. Algunos de ellos son:
Para seguir la dieta mediterránea se recomienda:
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